A lo largo del tiempo, “el” fue nombrado de distintas formas, por diferentes culturas y en diferentes tiempos. Pero eso no es lo que me trajo acá, no su nombre, sino, su presencia.
“El” Me amenazo, con algo imposible de no temer, era inaudito no pensar en esa tormentosa idea, y no querer… nada funcionaria, ni el suicidio ni el exilio, “el” me encontraría de cualquier forma, asique, huir no era una opción.
Ese día, por la mañana, la neblina me dificultaba la vista, incluso antes de levantarme, presentí que el día estaba feo; en el sentido de nublado, aunque estos días me gustan, este precisamente tenía un aire que te helaba los huesos, y no de manera literal, era algo mas, algo que no se podía ni ver ni oler.
Las hojas secas y húmedas, teñían todas las aceras, desde la puerta de mi casa, hasta la parada del colectivo, conté exactamente, 23 árboles, de los cuales solamente uno, estaba verde, el resto desteñían ese rudo color marrón te (que me recordaban el pobre desayuno que había tenido por falta de tiempo).
Ya una vez en la parada, me encontré rodeado de gente que no conocía, pasaban a mi lado como sombras, conversaban de sus vidas, leían sus libros y escuchaban música con sus auriculares, pero yo era ajeno, ajeno a sus vidas, incluso a su presencia.
Como en un sueño dentro de la neblina, parpadeé. La gente había desaparecido de mi vista, me encontraba solo en la fría mañana… Fue entonces, cuando “el” apareció de entre la bruma, se me acerco, y me murmuro al odio: “mucho dudo, incluso que en el infierno lugar alguno halla para vos”. Yo sé lo que eres y qué en que piensas, y también se que alguien como vos, no necesita lo que llaman “el tormento eterno”, vos estas para otra cosa. Y extendiendo su mano, me dio una tarjeta que decía “V.B.P Miembro de consejo”. Recién ahí lo entendí, nuestro delirio se había convertido en realidad y nuestro consejo oficial estaba armado.
En honor a los miembros ya oficializados, mis amigos!
PD: cabe aclarar que V.B.P es la abreviatura para Very Bastard People.
Cerrado.
Hace 5 años